20 junio 2022

Ansiedad por separación


Normalmente entre las 6 a 8 semanas de edad el cachorro comienza a ser rechazado por su madre fundamentalmente cuando intenta seguir mamando. 

Causas:
Esta situación, llamada desapego primario, tiene la finalidad de debilitar el vínculo materno-filial para que el cachorro se independice y ocupe el lugar que le corresponde dentro de la estructura jerárquica del grupo. Los lazos sociales que reemplazan al materno-filial, se terminan de establecer y reforzar durante la pubertad en los machos y el segundo celo en las hembras (desapego secundario). De esta forma el individuo pasa a ocupar el lugar que le corresponde dentro de la estructura jerárquica del grupo. 

Cuando los propietarios adoptan al cachorro pasan a ocupar el lugar de la madre natural y si establecen un vínculo afectivo muy intenso (por ej. permanece todo el día con ellos, está mucho tiempo en brazos, duerme en la cama, lo alimentan primero o junto con ellos, etc.), se prolonga el vínculo maternal durante el resto de su vida por no producirse ese desapego natural y estableciéndose un estado de hiperapego.

Si en el futuro tiene que quedar solo durante algún tiempo por día porque el dueño comenzó a trabajar o cambió de trabajo y ahora debe salir, se presentarán conductas de destrucción, vocalización excesiva y eliminación inadecuada. La misma situación se presenta cuando los propietarios se ausentan por tener que viajar, por fallecimiento de uno de ellos o se produce una separación del matrimonio. Otras veces tienen nuevas ocupaciones y no le pueden prestar atención como antes o se encuentran en otra habitación a la cual el perro no puede acceder, se tuvieron que mudar y en la nueva casa se le asigna un lugar más apartado, nació un bebe o por distintos motivo se lo lleva a un pensionado.

Signos clínicos:
1) Hiperapego del perro con el propietario caracterizado por dependencia recíproca (sigue a la figura de apego por todas partes).

2) Signos en ausencia del propietario que se presenta desde que queda solo hasta varios minutos u horas posteriores a la partida (por lo general 30 minutos después) y que consisten en ladrido excesivo, aullidos, gruñidos, rascar la puerta, la ventana o la pared en las inmediaciones del lugar de salida en un intento por acompañarlo. Posteriormente aparece una masticación destructiva sobre muebles y objetos muy utilizados por su dueño como zapatos y ropas, como consecuencia de una conducta exploratoria alterada resultante de la ansiedad que genera la separación. 



Esa misma ansiedad genera disturbios neurovegetativos con la consiguiente micción y defecación inadecuada dentro de la vivienda (enuresis y/o encopresia). Nada de esto corresponde a una actitud de venganza del animal por haber quedado solo como invariablemente interpretan los propietarios.
En algunos pacientes el cuadro es más grave y aparecen síntomas de hipersalivación, vómitos, diarrea y actividades estereotipadas como el lamido excesivo de alguna parte del cuerpo.

3) A medida que el cuadro evoluciona aparecen los signos durante los preparativos de la partida del propietario y los signos durante el regreso del mismo. Los primeros consisten en una mayor actividad, inquietud, saltar o deambular a su alrededor y vocalizaciones en forma de quejidos.

El tratar de tranquilizarlo con caricias, palabras o alimento se produce un reforzamiento positivo de la conducta. Otras veces se observa un estado depresivo con el paciente acostado en un rincón y ajeno a los llamados de su dueño.

Los signos durante el regreso incluyen una gran excitación y un saludo exagerado que tarda mucho en terminar. La persona es seguida constantemente por toda la casa sin conseguir sacarse de encima al perro.

Diagnóstico:
Por entrevista detallada con el propietario, examen clínico del perro y exámenes adicionales para excluir casos con causas orgánicas.

Tratamiento:

1) Ambiental:
Aumentar el ejercicio estableciendo una rutina diaria de 2 o 3 paseos durante un promedio de 30 minutos, de esta forma la energía cinética disponible para los destrozos es menos.
Enriquecimiento del entorno por medio de 2 o 3 juguetes para masticar que se cambian cada varios días evitando la habituación a los mismos. Prender una radio cuando se encuentra presente el dueño y después de un tiempo (cuando se condicionó a la misma) se la puede dejar encendida cuando queda solo. Instaurar el desapego rechazando todo pedido de atención, comida, paseo o juego por parte del perro y no permitirle dormir cerca del dueño.
Solo el propietario debe iniciar esas actividades o cualquier otra muestra de afecto. También se podría adoptar otro animal como compañía, pero no siempre es factible de implementar y se debe trabajar correctamente para establecer previamente un vínculo adecuado entre los animales.

2) Metodológico:
Hacer desparecer todas las conductas asociadas con la partida de los dueños (ritual de salida) ignorando por completo al perro durante media hora antes de la partida.
 
Ignorar al perro cuando se llega haciendo desaparecer el comportamiento excesivo de recibimiento hasta que se calme y relaje (ritual de regreso).

Desensibilización sistemática a la separación : realizar todos los movimientos habituales antes de salir  (tomar la cartera, las llaves, cerrar puertas, etc.) pero no salir. Cuando ya no se aprecie respuesta, el dueño sale por poco tiempo y si cuando regresa se ha comportado correctamente lo premia efusivamente.

Contracondicionamiento: enseñándole previamente a cumplir una orden para recibir afecto o alimento y cuando el dueño está por salir le da la orden de que espere sentado. Con el correr de los días se aumenta progresivamente el tiempo de ausencia generando una habituación a quedarse solo, pero ese aumento no es lineal sino que se realiza en forma alternada (por ej. 2 min.- 3min.- 5 - 3 - 7 - 2 - 5 - 3 - 7 - etc.).

La obediencia también permite controlar al animal por medio de órdenes durante el regreso y evitar los signos de excitación y de saludo exagerado. Mientras dure el tratamiento hay que asegurarse de alguna forma que no se produzcan períodos de ausencia que desencadenen la ansiedad por separación, ya que se puede perder todo lo realizado.

No utilizar el castigo en ninguna de sus formas y mucho menos cuando el dueño encuentra los destrozos o los excrementos dentro de la casa a su regreso. El arreglo y la limpieza del lugar no se debe realizar en presencia del paciente.

3) Farmacológico:
Existen drogas psicotrópicas que pueden ser utilizadas para fortalecer el tratamiento.


Fuente: Dr. Juan Enrique Romero - médico veterinario (MN: 3010, MP: 2132)

17 junio 2022

Los perros, compañía de gauchos e indios


Introducidos en América por los conquistadores, fueron fieles laderos de los pobladores del Río de la Plata. Si bien existieron en América algunos tipos de canes, la primera introducción del perro en los campos rioplatenses fue obra de los conquistadores españoles, para que colaborasen en la guerra y la caza. Aquí se multiplicaron con tanta facilidad como las vacas y los caballos. Con el tiempo, muchos perros adquirieron carácter cimarrón y se agruparon en jaurías tan abundantes como peligrosas. En las orillas de Buenos Aires se les tenía temor y nadie circulaba a pie sin estar prevenido de un posible ataque.

El Viejo Vizcacha

En las tolderías del indio y en el rancho del gaucho siempre estuvieron presentes. Según el segundo hijo de Martín Fierro: "Vizcacha(*) andaba rodiao de perros que eran todo su placer; / jamás dejó de tener / menos de media docena; / mataba vacas ajenas / para darles de comer". El viejo dormía entre ellos (cosa que hacían muchos para apaciguar el rigor de los inviernos) y entre ellos murió. Los mencionó en dos de sus consejos, cuando dijo que no había que detenerse donde se vieran perros flacos, y que no debía creerse "en lágrimas de mujer ni en la renguera del perro".

En 1845, el médico y naturalista Francisco Javier Muñiz redactó sus "Voces usadas en las Repúblicas del Plata, la Argentina y la Oriental del Uruguay", y dedicó varias líneas al can. Dijo: "Nuestros campesinos miran en el perro un compañero útil para la caza de los avestruces. A más del servicio importante que les prestan, defendiéndolos del tigre, les proporcionan, sin costo, abundante cosecha de mulitas, peludos, perdices, etc. Por eso dicen que el perro es el mejor compañero del pobre. Donde dentra el cristiano, dentra el perro. Cuando no fuesen mis bolas, mis perros me darán de comer, porque sin ellos no somos nadie en el campo".
Muñiz también reseñó al perro ovejero, "que cuida la majada y que hace con ella las veces de pastor". No es posible saber si se refería al collie escocés, aunque es factible que los británicos, promotores de la ganadería lanar, ya hubiesen introducido algunos. De todos modos, el cuidado de las razas no parece haber sido importante en esos años, y en la tarea de arrear vacas y ovejas también figuran perros criollos.
"Un alto en el campo"

Los ejemplares que muestran pintores como Mauricio Rugendas o León Pallière son de diversos aspectos. En "Un alto en el campo", obra del primero, aparece uno lanudo y un tanto rechoncho y otro flaco, con pinta de galgo.

Los gozques
La mixtura libre fue dando, sin embargo, cierto aspecto preponderante en algunas zonas. Así, en la Banda Oriental, nació una raza que tras ser criada y estandarizada derivó en el calificado Cimarrón Uruguayo o Gozque. A este tipo de can se refirió José Gervasio de Artigas al contestar una propuesta que le hizo llegar, a través de un emisario, el general portugués Lecor: "Dígale a su amo que cuando me falten hombres para combatir a sus secuaces, los he de pelear con perros cimarrones".

Cimarrón Uruguayo

Guillermo H. Hudson recordó en "Allá lejos y hace tiempo" al líder de los perros de la estancia paterna, llamado César, que "era superior a todos los demás perros de la casa (doce o catorce), tanto en inteligencia y en valor como en tamaño", aunque se trataba de un perro común. Colaboraba en la guardia nocturna y la junta del ganado. Murió de viejo y nadie se animó a cortarle la agonía final, "porque no se acostumbraba en el país matar a un perro porque llegase a viejo". Sí tuvo que sacrificarlo el paisano Rosendo, del popular poema nativista El Malevo, de Osiris Rodríguez Castillos. Es que el fiel compañero había adquirido rabia.


Fuente: Diario La Nación>Campo>Rincón Gaucho

(*)  Vizcacha: se refiere al Viejo Vizcacha, personaje de "Martín Fierro" de José Hernández

08 junio 2022

El vínculo entre el ser humano y el perro


El vínculo entre el ser humano y el perro en la obra de Marcial y Juvenal

Por Cayetana Paso Rodríguez


Resumen:
Utilizando como fuente de estudio los epigramas de Marcial y las sátiras de Juvenal, se considera el vínculo existente entre el hombre y el perro en la Roma del emperador Domiciano, mediante el análisis de los diferentes aspectos de convivencia que el ser humano establecía con el perro. Finalmente, se llega a una reflexión sobre la calidad de vida de estos animales en su coexistencia con el hombre de aquellos días.

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02 junio 2022

Día Nacional del Perro



En Argentina, el 2 de Junio es el Día Nacional del Perro, en homenaje al comportamiento de un perro que perdió la vida defendiendo a su guía.

Chonino era un ovejero alemán nacido el 4 de abril de 1975. El 15 de diciembre de 1977 ingresó a la Policía Federal Argentina luego de aprobar las pruebas de aptitudes físicas y psíquicas requeridas para ser un perro de Policía.

Fue adiestrado como perro de seguridad y clasificado como perro de presa. Esto significa que sólo podía entrar en acción cuando había peligro de vida tanto para sus conductores como para terceros inocentes.Su primer servicio lo cumplió en el estadio de River Plate, en el partido inaugural del Mundial de Fútbol de 1978, realizado en nuestro país.


El 2 de Junio de 1983 Chonino fue asignado para un patrullaje de la Comisaría 45°, en Capital Federal, a los Suboficiales Luis Sibert y Jorge Ianni. Ese día los policías identificaron a dos sospechosos y al exigirles ver su documentación se produjo un terrible tiroteo. Uno de los policías, el amo de Chonino, fue herido. Fue entonces cuando, en defensa de su guía, el perro se abalanzó contra uno de los delincuentes. Al hacerlo, el otro bandido disparó contra él hiriéndolo de muerte.


Pero Chonino en su boca tenía un trozo de bolsillo que contenía los documentos de los asaltantes. Gracias a este acto, los ladrones pudieron ser identificados. Cinco días más tarde, el personal de la Policía Bonaerense detuvo a los agresores.

Actualmente los restos de Chonino descansan en el Círculo de la Policía Federal Argentina. Para recordarlo, en el interior del Predio de Policía Montada, existe una estatua de bronce y en su honor la Municipalidad de la Ciudad de Buenos Aires le dio su nombre a un pasaje del barrio de Palermo.

Desde 1991 la calle que une la Avenida Casares con la calle Salguero, en la Capital Federal, se denomina Pasaje Chonino. El 2 de junio de 1998, luego del ingreso de la Fanfarria, el comisario Jorge Depresbitero, jefe de la División Perros, anunció la inauguración de la Pista de Adiestramiento de Canes, llamada desde entonces, “Chonino”. La Policía Federal, a través de la División Perros, rinde cada año su homenaje a este perro ejemplar. 



A partir de 1996, por pedido de la periodista y escritora Cora Cané(*) y con el apoyo de sus lectores, se celebra todos los 2 de Junio el Día Nacional del Perro.




(*) Cora Cané es quien escribió  "Clarín Porteño" todos los días desde 1957 hasta 2014 (durante 57 años) en la última página del diario Clarín.

 
Fuente: losperrosprimero.com.ar