Un estudio realizado en la Universidad de Helsinki, Finlandia, se propuso determinar el rendimiento de 13 razas de perros en diversas pruebas cognitivas. Con una muestra de más de 1000 perros, los investigadores encontraron diversas diferencias raciales en rasgos como la cognición social, la capacidad de resolución de problemas y el control inhibitorio.
Investigaciones previas han demostrado que la raza es un factor que puede afectar la personalidad y el comportamiento de un perro. Sin embargo, aún se sabe muy poco sobre las diferencias raciales en cuanto a rasgos cognitivos, como la capacidad para resolver problemas, la memoria, el razonamiento lógico y la cognición social. El objetivo de este estudio fue explorar qué rasgos cognitivos pueden diferir según la raza y cómo se compara cada raza con otras para cada uno de los rasgos estudiados.
“Los resultados sugieren que diferentes rasgos cognitivos pueden haber sido favorecidos en diferentes razas”, dice la investigadora doctoral y autora del estudio, Saara Junttila .
Estudio de cognición a gran escala
La muestra consistió en 1002 perros finlandeses que participaron en la batería de pruebas cognitivas smartDOG. SmartDOG es una empresa propiedad de la coautora Katriina Tiira, que ofrece diversas pruebas cognitivas y conductuales a dueños de perros que desean comprender mejor las características de sus perros. El análisis solo incluyó razas de perros con un mínimo de 40 individuos evaluados, lo que resultó en 13 razas
Los perros participaron en siete pruebas cognitivas y tres pruebas de comportamiento. Se encontraron diferencias significativas entre razas en las pruebas que medían el control inhibitorio, la comprensión de gestos humanos (como señalar con el dedo en una dirección específica), la capacidad de resolución de problemas espaciales (rodeando una valla en forma de V), el nivel de actividad, el saludo a una persona desconocida, la exploración en un entorno novedoso y el comportamiento durante una situación de resolución de problemas imposible (es decir, si el perro intenta resolver el problema de forma independiente o pide ayuda al humano).
“No encontramos diferencias raciales en las tareas que miden el razonamiento lógico ni la memoria a corto plazo”, afirma Junttila. “Es posible que estos rasgos no se hayan seleccionado en diferentes razas o que se vean más afectados por factores ambientales, como los métodos de entrenamiento, las experiencias previas o la propia situación de la prueba”.