Un estudio presentado en el Congreso Mundial de Anestesia Veterinaria ha llevado a cabo un análisis estadístico preliminar para identificar las razas caninas con mayor riesgo de mortalidad asociada a la anestesia
Recientemente, ha tenido lugar el Congreso Mundial de Anestesia y Analgesia Veterinaria (WCVAA), donde se han presentado algunos pósters científicos. Uno de ellos ha sido un análisis secundario del estudio COMPLRED de mortalidad anestésica veterinaria dirigido por el catedrático de Anestesiología Veterinaria de la CEU UCH, José Ignacio Redondo.
En este estudio se trató de identificar de forma preliminar asociaciones entre la raza de perro y la mortalidad anestésica, utilizando los más de 55.000 casos de COMPLRED. Se incluyeron todos los perros de la cohorte original sometidos a anestesia general.
El criterio de valoración fue la muerte relacionada con la anestesia en un plazo de 48 horas, excluyendo la eutanasia o las muertes atribuidas a complicaciones quirúrgicas o médicas no relacionadas con la anestesia.
La exposición principal fue la raza, según lo registrado por el veterinario responsable. Las razas se asignaron al grupo y la sección de laFederación Cinológica Internacional (FCI) utilizando su clasificación.
La conformación braquicefálica se definió a priori utilizando un estándar basado en el fenotipo de la literatura BOAS. También se incluyeron las razas afectadas por la mutación del gen MDR1, que afecta a la tolerancia a algunos medicamentos.
Para el análisis estadístico, se preespecificaron perros mestizos como referencia. El análisis incluyó 55.022 procedimientos anestésicos caninos: 54.167 perros sobrevivieron, 378 murieron debido a la anestesia, 360 fueron eutanasiados y 117 fallecieron por causas relacionadas con la cirugía. La tasa bruta de mortalidad relacionada con la anestesia fue del 0,69%.
Un total de 241 categorías de raza fueron registradas, mientras que el número de perros mestizos fue de 16.129, con una tasa de mortalidad del 0,68%. A nivel de raza individual, tres razas comunes presentaron una mayor mortalidad estadística que los perros mestizos con un umbral estadístico convencional de 0,05. Estas fueron el pastor alemán (1,46%), el chihuahua (1,35%) y el bulldog (1,26%).
Utilizando un umbral relajado (0,10), los perros pastores de Shetland, los chow chow, los doberman y los carlinos presentaron tasas de mortalidad más altas en comparación con los perros mestizos.
Las tasas de mortalidad del resto de razas no difirieron de las de las razas mixtas, incluso bajo este criterio. Al explorar las secciones de la FCI, la sección de chihuahua mostró el exceso de mortalidad nominal más significativo (1,35%), mientras que la de los perros pastores estuvo cerca de la significancia (0,99%; p = 0,064), pero no alcanzó el umbral. Las demás secciones no mostraron evidencia de diferencia. La mortalidad no difirió entre machos y hembras.
La mortalidad de los perros con la mutación del gen MDR1 no varió. Por el contrario, los perros braquicéfalos mostraron una mayor mortalidad bruta que los perros no braquicéfalos (0,82% frente al 0,65%).
“Un pequeño subconjunto de razas (pastor alemán, chihuahua, bulldog) y el fenotipo braquicéfalo se asociaron con una mayor mortalidad bruta en comparación con los perros mestizos. Por el contrario, los grupos FCI fueron en general similares. La sección de chihuahuas presentó diferencias, mientras que las razas asociadas a MDR1 no mostraron un riesgo excesivo”, explican.
“Estos hallazgos respaldan la comunicación de riesgos teniendo en cuenta la raza, una mayor vigilancia en pacientes braquicéfalos y motivan la realización de trabajos futuros para explorar las vías causales con mayor ajuste”, concluyen.
Fuente: Animal's Health - F.R.López
