Cuando la mayoría de la gente considera la forma en que piensan los perros, se centra en un hecho muy obvio: los perros no son personas. La suposición que sigue es que los perros no piensan como personas.
Si bien es cierto que los perros no son humanos y, de hecho, piensan de manera diferente a nosotros, somos más parecidos de lo que creemos.
Los perros llegan a comprender el mundo, y entre ellos, de la misma manera que los niños humanos son presentados al mundo, a través de pistas visuales y olfativas. Son observadores particularmente agudos del lenguaje corporal, y la cantidad de información que pueden obtener del trasero de otro perro es asombrosa. A diferencia de los humanos, cuya principal forma de comunicación y comprensión es la voz, los perros se basan principalmente en el olfato, seguido de la vista, luego el sonido y finalmente el uso de la voz.
Por ejemplo, un perro aprenderá un gesto con la mano, una señal visual, mucho más rápido que una orden verbal. Si tocas tu pierna, aprenderán que significa "ven aquí" mucho más rápido de lo que te entenderán diciendo las palabras. De hecho, una vez que entienden la señal visual, es la asociación del sonido con ese gesto de la mano lo que les enseña lo que significan las palabras.
Si bien existen similitudes en la forma de pensar de los humanos y los perros, también hay grandes diferencias. Los perros son plenamente conscientes de esta diferencia y no se les puede engañar para que crean que los humanos son perros, incluso cuando hacemos todo lo posible por emularlos. Los perros son buenos observadores del comportamiento humano y comprenden las diferencias entre las personas y los perros. No intentan comunicarse con los humanos de la misma manera que lo harían con otros perros. Saben que somos diferentes y no los entenderíamos, por lo que actúan de una manera que los humanos puedan entender.
Caminar hacia la puerta trasera y ladrarle es su versión de pedir que le dejen salir.
Sentarse frente al armario que saben que contiene su cena y tocarlo es su forma de decirnos que tenemos hambre.
Estas son cosas que requieren manos humanas: abrir puertas, paquetes de alimentos y verter cosas en tazones. Los perros son plenamente conscientes de que no pueden (normalmente) hacer estas cosas por sí mismos y son igualmente conscientes de que los humanos pueden hacerlo. Entienden cómo pensamos, quizás mejor de lo que nosotros entendemos cómo ellos piensan.
Los perros son ciertamente mejores para explicar las cosas en términos humanos que nosotros para explicar las cosas en términos de perros. Les enseñamos a entender nuestra forma de hacer las cosas porque no podemos hacer las cosas a su manera. Los perros, por otro lado, aprenden un idioma totalmente diferente para comunicarse con nosotros, un idioma que atraviesa especies, eso es bastante impresionante.
Los perros son mucho más inteligentes de lo que la gente cree.
Entonces, ¿cómo piensan los perros?
Los perros no leen ni escriben, por lo que no piensan con palabras y símbolos como lo hacen los humanos. Sin embargo, ciertamente se les puede enseñar a reconocer símbolos y palabras y las acciones asociadas con ellos, pero esto se hace a través de un entrenamiento muy cuidadoso y no es su estado natural.
Pero los perros siguen siendo muy similares a nosotros en lo que piensan, incluso si no piensan de la misma manera. Tienen metas y necesidades. Saben que necesitan comida y refugio, por lo general tienen un gran deseo de aprender cosas nuevas y conservan sus instintos de caza, enterrados en sus memorias genéticas, de una época en que los perros eran lobos y cazaban su propia comida. Por eso un perro salvaje cazará, no pasará hambre. Pero los perros también necesitan jugar y entretenerse, y necesitan tranquilidad y consuelo físico.
Lo más importante que hay que recordar cuando se trata de comprender cómo piensan los perros es que se parecen mucho a nosotros, en términos de deseos y necesidades; simplemente perciben las cosas de manera diferente y luchan por expresarse de una manera que nosotros entendamos. Los perros tienen tantas necesidades y deseos como las personas, aunque se refieren a cosas muy diferentes. Una vez que comprendes lo que un perro necesita y quiere, es mucho más fácil comprender su comportamiento y te acercas a entender cómo piensan.
Fuente: Animal Jobs Direct (UK)
Cursos: Comportamiento Canino, Primeros Auxilios, etc.
