Un mortal tornado de categoría EF-4 golpeó a Cookeville a principios de marzo. Diecinueve personas murieron y muchas más resultaron heridas después que el tornado de 175 mph hiciera un camino de destrucción a través de la ciudad poco después de la medianoche del 3 de marzo. Pero a veces, después del desastre, las comunidades se unen y sacan lo mejor de las personas.
Cuando amaneció en Cookeville después de esa horrible noche y la devastación se hizo evidente, Sarah Romeyn supo que tenía que ayudar. Ella se enteró que una familia había perdido su hogar y a su perro, Bella. A Romeyn ahora se le atribuye haber reunido a Bella con su angustiada familia, unos 54 días después de la tormenta. Bella, un pastor australiano que desapareció de la casa de Eric y Faith Johnson, fue localizada, atrapada y devuelta a su familia.
Bella despertó a la pareja y a sus hijos en la noche de la tormenta alertando que algo malo estaba pasando, momentos antes de que ocurriera el tornado. Segundos después, la casa fue arrasada. La familia escapó con vida, pero cuando salieron de los restos después que pasó la tormenta, se dieron cuenta que faltaba algo: Bella. A kilómetros de distancia, Romeyn, que conocía a los Johnson de la iglesia, se enteró que Bella estaba perdida y decidió buscarla, así que afortunadamente logró encontrarla y llevarla a los Johnson.
Fuente: Washington Post - Matthew Cappucci
